PERIFÉRICOS

“la verdadera revolución del cine independiente ha cristalizado en el frente ideológico. Al ser los propios cineastas los dueños de los medios de producción, se veían libres de sometimiento alguno a los aparatos represivos de la ideología dominante. Algunos supieron utilizar correctamente esta libertad. Otros no, y cayeron en la trampa de la exaltación del propio ego. Para unos fue un arma de lucha; para otros, un lujo a su alcance, una paja mental.

Los que realmente lograron subvertir el orden ideológico con sus películas fueron quienes hicieron correcto uso del medio de que eran dueños para mostrar un análisis de la realidad en total contraposición con la falsa imagen de la misma, transmitida por el sistema. Esto equivale a afirmar que no todo el cine marginal fue realmente independiente, ya que en ciertas ocasiones también era víctima de ideologías que, aunque opuestas a la dominante, eran dominantes a su vez. Valga el ejemplo del cine de agitación y propaganda, el agitprop. Sin embargo, el primera paso de la subversión del hecho cinematográfico estaba dándose y a partir de ahí podía empezar a clarificarse el verdadero concepto de Cine independiente.”